Días atrás, leí en el periódico la noticia que Damien Hirst, el artista ingles mas cotizado del mundo, abre su propia galería de arte.
Hirst es bien conocido por sus desafíos en el mercado del arte, desde sacar a subasta directamente sus obras, hasta organizar una feria de arte de artistas y ahora su propia galería. Conceptos que se tenían como conflictos de intereses.
Creo que lo que define un artista hoy en día, es que sea además de creativo y original, un empresario. Ya no vemos la imagen del artista bohemio y desprolijo, atormentado por su trabajo si no empresarios, a veces de saco y corbata, que se dedican a controlar su producción, promocionar y vender sus propias obras. Incluso la mayoría de las veces, ni siquiera ejecutan la obra, solo supervisan sus encargos, hechos a personas especializadas en cada área.
En coaching esto se llama poder de acción, donde tomo las riendas de mi vida y mi trabajo, sin entregar el poder a otros.
Desde la postura del coaching ontológico, el poder de acción se basa en las siguientes premisas:
Centrado. Un bueno comienzo de cada día, donde meditamos o simplemente ponemos la mente en blanco para poder callar nuestra maquina de hacer juicios y revisar la conversación que estamos teniendo.
Atender lo fundamental. La vida cotidiana nos lleva a diferentes situaciones y es importante no perder el foco.
Compromiso. Es nuestra capacidad de coordinar acciones con los otros. Mi capacidad de hacer pedidos efectivos y ser consistente con las promesas asumidas.
Conversaciones para coordinar acciones. Una de las competencias claves de la efectividad del ser humano, tiene que ver con su capacidad para diseñar las conversaciones, sabiendo cuando es conveniente abrir una o cerrar otra, o saber moverse a través de ellas. Es importante diseñar las conversaciones que queremos tener para lograr mayor efectividad.
Actitud de aprendizaje. Esta actitud nos permite vivir los problemas o situaciones inevitables y los desafíos desde la posibilidad de mejorar nuestra forma de ser. Saber pedir ayuda y explorar nuevas posibilidades de acción.
Autoconfianza. Sostenemos que el grado de confianza que tenemos de nosotros mismos, define nuestra identidad y el espacio de posibilidades de acción que tenemos en la vida.
Estar en buenas relaciones con el mundo. A veces cuando las dificultades se presentan, creemos que el mundo esta en contra nuestro. Se pierde mucha energía pensando en lo que se opone y en lo que no podra ser en vez de enfocarte en lo que se puede lograr.
Pasar a la acción. Sin acción no hay resultados.
Lo único que produce los resultados es el poder de acción, por eso como los artistas contemporáneos, tomar las riendas de tu vida es un arte.