Si hay una cosa que nos encanta, y tenemos un montón en los techos de nuestra casa, son los móviles decorativos, o esculturas cinéticas, como se las llama por su movimiento sobre el aire. Grandes del diseño o la arquitectura, diseñaban móviles, pero no se muy bien porque, se dejaron de usar, o se pensaron que eran cosas de los niños. Tremendo error.
Diseñadores con Alexander Calder, diseñaba móviles y fue uno de sus grandes en este campo. Pero otros como Dunchamp, Kandinski o Miro, también.
Si bien, en espacios de niños, se suele poner siempre un móvil, para estimular su creatividad, en decoraciones de salones, si la altura lo permite puede ser un punto. El tema de la altura hay que tenerlo en cuenta, porque si el espacio es muy bajo no se lucen y posiblemente reste movilidad. Cuanto más alto sea el espacio, quedarán mejor.
Ya en el 2015 os mostrábamos un ático en París, donde el móvil llenaba su doble altura, con un techo de cristal. Podéis recordarlo completo desde aquí…
Ahora dos amigos, han creado en París, la marca Volta, que recupera estos objetos de decoración, basándose en Calder, no solo para los techos sino también más pequeños para una mesa. Pequeñas esculturas cinéticas, que sinceramente nos encantan y nos dan idea de un montón de utilidades estéticas, porque quedan bien con cualquier decoración.
No es de extrañar, que esto suceda en Francia. Es el país que siempre ha continuado con la tradición de los móviles para decorar un espacio. Aunque para comercializar modelos, los nórdicos, ya llevan años haciéndolo.
En Instagram podéis ver todas sus creaciones.
Su ubicación y suave movimiento en el espacio, cumple varias funciones. Son bonitos y estéticos, mueven el aire y según el Feng Shui, la energía. Porque no te animas a colgar uno. No te arrepentirás. Es fácil encontrarlos en las tiendas de los grandes museos, como objetos de diseño. Te animas? te los recomendamos.